jueves, 8 de septiembre de 2011

En mi mundo de dolor: Capitulo 2: “Neeko house”

Preparé mis cosas, bueno, técnicamente eché todas mis cosas a mi mochila incluyendo a mis peluches aunque ni si quiera sé para qué los voy a usar. A mis charas las eché en mi “Porta-charas”. La pieza quedó casi vacía porque quedaron las cortinas, la cama y los muebles. Luego bajé las escaleras y en la puerta estaban todos reunidos con sus respectivas maletas. Si, íbamos a dejar nuestra casa por un largo tiempo.
-Amu, ¿No se te queda nada? – me preguntó mi mamá mientras miraba la casa con lástima.
-No al parecer no-
-Mira que si se te queda algo va a ser un poco difícil de recuperarlo porque primero vamos a sacar la copia a la llave de la casa y luego de 1 semana ir a dejártela- mi papá miraba la casa con un poco de pena y por eso le sacaba como 2 fotos por cada 5 segundos, en cambio Ami miraba la casa como si no le importara en lo absoluto. Nos subimos al auto y me quedé dormida. Luego de un rato desperté y vi que habíamos llegado a una enorme casa con grandes decoraciones al exterior, demasiado bonita para mí y al parecer tenía tres pisos. Nunca había visto una casa tan grande como esta, era de color blando y la adornaba una linda fuente al centro. Se parecía a la casa blanca versión súper decorada y menos vieja. Nuestro auto rodeó la fuente y nos bajamos al lado de una escalera.
-OOhhh!! Es muy grande- dijo mi papá
-Nunca pensé que era así de grande- dijo mi mamá
-Papá, mamá miren en la puerta! Hay una linda señora allí- era cierto, pues de adentro de la puerta al frente de las escaleras había una señora que se avecinaba a encontrarnos. Ella era rubia de pelo largo hasta la cintura. Tenía los ojos morados como Utau, vestía un vestido azul y zapatos celestes. Bajó a saludar a mi mamá que parecía contenta de haberla visto.
-Souko! Hace tiempo sin verte- dijo mi mamá abrazándola.
-Pero si hablamos ante de ayer!- y la señora se rió.
-Para mí es mucho tiempo sin ver a mi mejor amiga- dijo mi mamá alejándose de su amiga para poder verla a los ojos.
-Bueno, bueno, es un gusto tenerlos aquí- dijo la madre de Utau; luego hizo un ademán para que entráramos en la casa, pero mi mamá la rechazó.
-Lo siento mucho pero ahora tenemos que tomar un vuelo directo a Estados Unidos para ver a mi sobrina y te vuelvo a repetir que muchas gracias por tener a mi hija en tu casa- y mi mamá hizo una reverencia de muestra de agradecimiento. ¿A ESTADOS UNIDOS? Wow eso era muy lejos para ir donde mi prima. Los extrañaría mucho pero por suerte me vendrían a ver, mientras decían esto mi papá me bajó las maletas.
-No te preocupes, mi casa como puedes apreciar es muy grande y tenemos como seis habitaciones extras- dijo la señora. Yo por mi parte estaba muy triste.
-¿Y dónde está la señorita que cuidaré?- preguntó la señora aunque sabía perfectamente que yo estaba ahí y que yo sería a quién cuidaría.
-Aquí está- mi mamá me tomó por la espalda y me puso en frente de la señora- se llama Amu como te comentaba ayer y tiene 13 años- la señora me miró de pies a cabeza y me dijo muy amablemente:
-Es muy bonita y se ve muy simpática y buena niña- ella se acercó a mi- de seguro te gusta la ropa no? También cocinar?- Ran salió de su huevo y dijo:
-Y hacer deportes también!- de seguro estaba celosa, y yo como pegándole al aire la guardé y miré a la señora que parecía extrañada.
-Esteee… ¡Era un mosquito! Y no quería que la picara- la señora se limitó a sonreír y me acarició la cabeza muy lentamente.
-Sí, es muy buena niña y creo que se llevarán bien con Ikuto y con Utau ¿Ya debes conocerlos no? ¿Y a mi marido?-
-Sólo conozco a Ikuto y a Utau, a su marido nunca lo he visto- me alegré de que hayan cambiado de tema.
-Sí a mi marido le caerás muy bien- y dejó de acariciarme la cabeza.
-Muy bien Amu, ya nos vamos te mandaremos la llave por correo- dijo mi mamá
-Pero ¿No que me la iban a pasar en una semana más cuando vinieran?-
-Bueno hija lo conversamos en el auto con tu papá y nos sale muy caro ir de ida y de vuelta para todas partes lo siento- yo tenía ganas de llorar pero no lo hice. Abrasé a mi mamá y a mi papá y luego le besé la frente a mi hermana. Mi mamá empezó a llorar pero luego se secó las lágrimas. Mi hermana con lo poco que entendía me dijo:
-Te enviaré muchas fotos mías ¿Ok?- yo me reí un poco y la abrasé. Mi mamá dijo:
-Lo bueno de tener una hija como tú es que no vas a llorar por eso porque eres nuestra Genial y sexy chica- luego de decirme estas palabras se metió al auto junto con mi papá y hermana y se fueron. Cuando los perdí de vista la señora me dijo:
-Si quieres llorar lo puedes hacer- escuché esto y mis lágrimas empezaron a caer sin cesar, la señora me abrasó y yo me devolví el abraso. De lo único que no me fijé es que desde una ventana Ikuto me miraba con curiosidad. Después de secarme las lágrimas entramos a la gran casa de Ikuto y Utau.
Una sirvienta de mediana edad me ayudó a cargar las cosas y me dijo:
-Por aquí señorita Amu- ¿Señorita? No estaba acostumbrada a tanto lujo pero luego pensé que dentro de poco me dirían Amu. Pasamos varias puertas y una de ellas estaba abierta. Por curiosidad miré hacia a dentro y vi un gran salón de baile y muchos sirvientes poniendo y sacando cosas. La señora me llamó la atención y le pregunté:
-¿Harán algo hoy en la noche?- la señora miró al suelo como pensando y luego me miró y me dijo:
-No lo sé, porque yo no trabajo en esta área, yo me ocupo de la cocina, de la sala de estar y un poco del jardín; aunque eso lo hace el jardinero, yo lo ayudo a regar y esas cosas- Sugoii! Ella solo hacía una de las miles de cosas que tenían que hacer en esta gigantesca casa. De pronto pasamos por una puerta un tanto grande y adentro se escuchaba un violín.
-¿Y qué hay allí adentro?- le pregunté a la señora y me dijo:
-Esa es la sala de música-
-Y quién está tocando allí adentro?-
-El señor de la casa, osea Aruto-sempai- me sorprendí. Nunca lo había oído tocar. Y de lo que me acuerdo es que según Ikuto estaba desaparecido.
-Disculpe, ¿No que Aruto-sempai había…?- me callé. Era mejor preguntarle a Ikuto directamente.
-Si señorita? Me había preguntado algo?-
-No, nada- luego subimos las escaleras de mármol. Eran como 7 veces más grande que la de mi casa y la baranda era hermosa porque eran como olitas. Ya estaba un poco cansada de tanto caminar. Cuando llegamos al segundo piso había un gran pasillo que recorría todo el segundo piso.
-Este es el piso de las piezas. Aquí están todas las habitaciones y todas tienen un baño en su interior. El suyo tiene bueno, ahí verá- Ya decía que iba a ser enorme y muy bien decorada. Cuando llegamos a mi habitación me dijo:
-Esta será su nueva habitación; está justo al lado de la pieza de Ikuto-san y tres habitaciones más allá está la de Utau-san- al lado mío estaba Ikuto, justo al lado de mi pieza. No se oía nada adentro de la pieza de Ikuto. La señora abrió la puerta y yo quedé sorprendida. Imagínense un cuadrado. La puerta estaba a la esquina del lado derecho en la parte de abajo del cuadrado imaginario. Había una ventana grandísima en la parte de arriba de nuestro cuadrado. Y afuera de la ventana con cortinas de seda se encontraba el balcón con sillas incluidas. En el lado izquierdo de nuestro cuadrado se encontraba mi cama con un velador y una alfombra. Al frente de la cama estaba un televisor última tecnología plasma. Y a los pies de la cama estaba la puerta del baño. Al lado derecho del televisor se encontraba mi closet. Cuando lo abrí casi me desmayo. Había demasiada ropa! Vestidos, zapatos, poleras, jeans y ninguno anticuado, todos a la moda. Pero unos vestidos eran como de vals y algunos zapatos hacían pares con los vestidos, como si siempre hubiera fiestas en la casa. Creo que eso concluiría mi pieza. El muro del lado derecho de mi pieza no había nada a excepto un espejo de 1 metro de largo con bordes de oro. La señora después de haberme enseñado la pieza se despidió y se fue. Saqué a mis charas para que vieran la pieza.
-Uhhh!!! Es muy bonita!!- dijo Miki con los ojos brillosos de tan linda la pieza.
-Yo quería pasar por la cocina!!-dijo Suu un poco angustiada pero también empezó a husmear mi pieza.
-Es un gran espacio para hacer ejercicio- dijo Ran.
-No se te ocurra ir a husmear la pieza de Ikuto- dijo Miki luego de haber inspeccionado la pieza completa.
-Como se te ocurre???- le dije yo, y luego empezé a correr detrás de Miki, que luego se unieron Suu y Ran. Quedamos tiradas en la cama. Luego alguien tocó la puerta, me asusté porque pensé que era Ikuto.
-Adelante- dije tan aristócratamente.
-Amu- dijo la mamá de Ikuto.
-Souko-sempai- dije y me paré enseguida.
-Oh porfavor no me llames así-
-¿Y cómo quiere que la llame?- ella lo pensó.
-¿Qué te parece mamá?- dijo ella con una cara sonriente.
-Es solo si quieres es que ya eres como parte de la familia y yo siempre he querido tener una tercera hija- A mí me molestó un poco, pero acabé aceptando.
-Amu, quería conversarte sobre el baile de esta noche- me dijo mientras se sentaba en la cama.
-¿Baile?- le dije un tanto extrañada, mientras las chicas la miraban fascinadas por el vestido que traía.
-Sí, esta noche tendremos un baile y me gustaría que tú fueras para presentarte, por lo tanto elijiremos un vestido y unos lindos zapatos; la cara no te la pintaré porque creo que eso es para las más adultas y además eres muy bonita, me gustan esos ojos Ámbares que tienes- yo no podía hacer más que aceptar; aunque no tuviera pareja lo único que tenía que hacer era saludar.
-Está bien Souk… mamá- diciendo esto Souko-sempai se fue directo al clóset y juntas elegimos la ropa. El vestido parecía de princesas. Era rosado (N/A: En este link háganse una idea de que andaba trayendo: http://www.google.cl/imgres?imgurl=http%3A%2F%2Fimg.chicade15.com%2Fwp-content%2Fuploads%2F2009%2F02%2Fvestido-rosa-1.jpg&imgrefurl=http%3A%2F%2Fwww.chicade15.com%2F2009%2F02%2F09%2Fvestidos-rosas-para-tu-fiesta-de-quince%2F&usg=__F6ise8x-XqpxHxvy8b19ucC92xA%3D&h=502&w=336&sz=26&hl=es&start=0&sig2=JEkTAmzDza7uPQZid-nnfA&zoom=1&tbnid=dAu6aNIqmm2HJM%3A&tbnh=166&tbnw=111&ei=oYIjTsmRMYrq0gHAnrnBAw&prev=%2Fsearch%3Fq%3Dvestidos%2Bde%2Bfiesta%2Brosados%26hl%3Des%26biw%3D1366%26bih%3D667%26gbv%3D2%26tbm%3Disch&itbs=1&iact=hc&vpx=799&vpy=67&dur=4093&hovh=275&hovw=184&tx=116&ty=180&page=1&ndsp=27&ved=1t%3A429%2Cr%3A5%2Cs%3A0&biw=1366&bih=667) y usaba unos zapatos blancos de ensueño. Mi pelo lo arregló Souko y me alisó el pelo más de lo que tengo y me puso una rosa hecha de cinta en el pelo. Las chicas me miraron asombradas.

Próximo capitulo: Un baile (:
¿Qué les pareció? Esta vez lo hice más largo para que no se aburrieran (: que lindo el vestido de Amu!!! La embarró yo casi me muero! En fin espero que les haya gustado chauuuu quedé con la media mano. 0:

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