viernes, 24 de junio de 2011

Capitulo 14: "¡Feliz cumpleaños Ikuto!"



Uf!!! Ya estoy totalmente agotada, ahora ya no puedo más, lo he buscado por todos lados, en la tienda, en la plaza, en algún callejón. Pero ahora voy directo a su casa ahí debí haber buscado primero pero a veces soy muy distraída y me volé completamente y como estoy apurada no caché ni pa' donde iba. No se como rayos lo hice, pero finalmente llegué. Ahí estaba, la casa de Ikuto. Algo recorrió mi espalda al tocar el timbre de la reja. No salió nadie a los primeros 5 minutos, pero cuando ya me disponía a darme por vencida Ikuto abrió la puerta de su casa. No tenía su uniforme, llevaba unos jeans azules con una camisa de color negro un poco ajustada diría y con el pelo bastante desordenado con cara de sueño. Yoru salió por detrás de él con una cara de recién despertado, nos vió y con un esfuerzo sobre natural nos fue a saludar.
-Hola-nya –despacito empezó a cerrar los ojos pero Miki lo peñiscó y voló casi a 20 metros de altura del dolor, fue chistoso. Ikuto por su parte seguía esperando en la puerta con las manos en los bolsillos, también tenía sueño; y yo ahí seguía parada espeando, con el regalo de Utau en la mano junto con el mío en la otra. En mi casa estaba el pastel porque no podía llevarlo conmigo sería un gran problema volar de casa en casa con tal enorme regalo. Luego de reunir el suficiente valor y tratar de no pensar que estaba roja, fui a saludarlo; sentía que mis piernas tiritaban por mi misma y no las podía mantener fijas en un punto, tanto que casi me caigo pero logré reaccionar y lo saludé.
-H-ho-hola Ik-Ikuto ¿Co-cómo estás?- (máxima naturalidad posible)
-Ah, hola em...¿Como estás?- y con una sonrisa forzada por el sueño y con las pocas fuerzas que le quedaban tomó mi mano y la besó.
-¿Qué te pasa?- solté mi mano rápidamente y casi se me cae el regalo cuando la quité.
-¿Huh? si no vienes a saludar mejor no vengas- eso sonó un poco cruel, pero la mayoría de los hombres, al estar semi-dormidos andan de mal humor, te dicen cosas pesadas, entre otras cosas. Espero aguantarle eso.
-¿Aún estabas dormido?- le pregunté.
-Pero es que anoche me quedé en el hospital hasta tarde asi que oviamente estoy cansado ¿No crees?- en verdad tenía razón. Pero ese no era el punto yo venía para otra cosa y cambiamos repentinamente de tema. Justo cuando me disponía a decirle feliz cumpleaños, él me interrumpió.
-¿Quieres pasar?- me preguntó.
-Em...si no tienes problema claro- mientras entrábamos a la casa me dijo:
-Quizá que esté todo desordenado, pero eso es porque mi mamá se pasa día y noche en el hospital y no tiene el dinero suficiente para contratar a un nana por decirlo de alguna manera- en el arco de la puerta no me dí cuenta de que alguien me había perseguido y observaba desde lejos, al principio no me importó. Bueno, ya no importa. Una vez que entramos ví que de todas maneras estaba en lo cierto; una vez adentro, parecía un basurero dentro de otro basurero multiplicado por 1000. Las cortinas estaban cerradas asi que todo tenía un aspecto triste. Suu casi se desmaya al ver el desorden, y tal como la última vez le ordenó a todos que ordenaran la casa, y esa vez, TODA la casa. Cuando entramos al living vi a Yoru corriendo con Suu detrás de el diciendo:
-Yoru!!! No te escapes-desu!- luego Ikuto me invitó a sentarme y yo me senté; y muy educadamente me preguntó:
-¿Quieres algo para beber? ¿Quieres un té?- lo pensé pero me acordé que compré bebida para cuando estuviéramos en mi casa asi que le dije:
-No gracias estoy bien así- él se sentó al lado mío con los brazos arriba del respaldo y como estaba al lado mío pareció que me estaba abrasando. Por suerte esta vez si pude mantener mi voz y no tartamudeé:
-Ikuto! Te traje estos 2 regalos!-la sonrisa me salía muy forzada porque Ikuto se empezó a reír mucho. Luego me acarició la cabeza y me dijo sonriendo:
-Realmente eres muy divertida- en ese momento tenía una cara muy dulce y tierna. 
-Ehhyy...- me sacó la mano de la cabeza y preguntó:
-¿Mhp? ¿Qué pasa?- esta vez sentí que estaba roja otra vez me dio rabia pero seguí; aunque ¿como? yo había hecho tantas cosas con Ikuto y me daba vergüenza decir eso? Al pensar eso lo miré y el me miró y aunque más roja estaba al fin lo pude decir:
-Ikuto...¡Feliz Cumpleaños!- y sin pensarlo 2 veces le entregué los regalos en la mano y él me los recibió.
-¿? Mi cumpleaños? Hoy es 1? No me había acordado- yo me quedé plop (quedé pa´adentro en otras palabras)
-Es mentira tonta, si lo sabía pero es bueno que tú me lo recuerdes y que me hayas traído un regalo es bastante lindo de tu parte- tomó los regalos y me dijo con total serenidad:
-Gracias Amu- después le expliqué que uno era mio y otro de Utau y cuando la mencioné dijo:
-Nunca lo olvidará al parecer- luego los abrió y se sorprendió.
-Gracias justo las necesitaba para mi violín- salió corriendo para el 2° piso y cuando volvió tenía el violín en la mano. Tocó hermosas melodías y una de ellas era cuando estábamos en el parque y el tocó una y yo cantaba. Luego me condujo a su pieza para dejar los regalos; el de Utau lo dejó en su velador, era una foto de su familia cuando pequeños y el mío, bueno el mío lo dejó dentro de su velador. 
Por alguna razón nos quedamos en silencio. Intenté decir algo por el ambiente pero derrepente estaba pagada contra la pared e Ikuto en frente mío y también con una mano en la pared. Intentó besarme pero no lo dejé yo me fui de la pieza y le dije:
-V-vamos a mi casa t- te tengo una sorpresa- bajé las escaleras hasta llegar al 1° piso. Las chicas estaban tiradas en el suelo y Yoru unos cuantos metros más allá; yo creo que cansado de tanto correr:
-Chicas nos vamos- las chicas no se levantaron por lo cual yo las levanté y llevé; como Yoru tampoco se podía levantar también lo cogí. Salí antes que Ikuto; cuando llegué a la esquina miré para atrás para ver si venía. Efectivamente lo vi cerrando la reja de la casa y caminando lentamente atrás mío; lo esperé y cuando llegó a mi lado no se atrevió a mirarme si quiera y seguimos en silencio hasta llegar a mi casa. Cuando llegamos no estaba el auto de mi mamá que me pareció extraño porque ya debería haber llegado. En cima de la mesa estaba mi celular con un mensaje. Decía:
" Hija lo siento ahora Ami quiso comer así que no llegaré a almorzar y tampoco creo que llegue hasta la noche ya que iré a una fiesta de cumpleaños con Ami, hay comida en el refrigerador para 2 platos por si te quedas con hambre te quiero tu mamá " 
Saqué el plato, invité a Ikuto a la mesa mientras los chicos dormían plácidamente en sus huevos. Serví en los platos y comimos en absoluto silencio. Después vimos tele y el computador, ya eran como las 6:00 y nos bajó el hambre otra vez. 
-Ikuto ¡Quédate en mi pieza y no salgas!- Ikuto obedeció y se quedó sentado husmeando, al principio me preocupé pero después me dije que el no podía hacer nada malo (pero si es gato) abrí la pieza y tenía las orejitas y colita de gato sentado en el suelo con una bolita de lana. Me miró y le cerré la puerta. Bajé y subí la torta, en ese momento los chicos estaban despiertos y me ayudaron a encender las velas. Cuando subía pensé: -No es momento para estar deprimida hoy es el cumpleaños de Ikuto- y con alegría le cantamos el cumpleaños feliz. Esta vez tenía una cara de felicidad que jamás había visto. Después de partir la torta sonó el timbre...abrí la puerta y...¡ERA TADASE!

Prox cap: ¿Qué pasará con Tadase?!!

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